Un nuevo escándalo dentro de la fuerza policial de la provincia de Corrientes se originó la semana pasada, luego de que otro cabo de Policía denunciara a un subcomisario, a cargo del PRIAR de la localidad de Alvear, de insultarlo, golpearlo y hasta de haberle disparado, al parecer "accidentalmente", dentro del destacamento. El hecho se manejó con mucho hermetismo, pero según la denuncia a la que tuvo acceso diario época, es grave y se espera alguna resolución desde el Ministerio de Seguridad. Se trata del primer incidente de estas características que debe afrontar el nuevo Jefe de Policía.
La denuncia data del lunes 12 de agosto y la formuló un cabo, de 28 años, con prestación de servicio en la Unidad Especial de Policías Rural y Ecológica de Alvear, tras un violento incidente protagonizado con el subcomisario Ratti Estoup, segundo jefe de aquella fuerza.
Según los dichos del efectivo, el lunes su jefe lo dejó por casi cuatro horas al cuidado de algunos caballos, secuestrados durante un procedimiento. Al joven policía le dio ganas de ir al baño, ató los dos equinos y fue hasta su base que queda a unos metros para hacer sus necesidades. Esta situación la advirtió el subcomisario, quien lo esperó frente a la dependencia y lo llamó ni bien este salió del baño, dándole un primer reto, sumando a eso insultos como "cuatrero, inútil, irresponsable, no servís para nada", ordenándole que vuelva a su puesto de inmediato. Segundos más tarde, el mismo cabo sugiere a un oficial, traer a los dos equinos más cerca de la dependencia a pastar, lo que al parecer no le gustó al jefe que con el antebrazo, le propinó un golpe en la cara y otro más en el abdomen, descolocando a todos los presente esa actitud.
A esto le sobrevino una catarata de insultos y más golpes, que obligó a al menos cuatro efectivos, todos ellos sargentos, a interponerse ante su jefe y su camarada, ya que se había salido de control la situación. En su denuncia, el policía afectado agregó otro incidente gravísimo que ocurrió dos días antes durante otra guardia con el mismo subcomisario y él. Siempre según los dichos del suboficial, se encontraba frente Ratti Estoup al parecer recibiendo otra reprimenda. El jefe estaba manipulando su arma, cuando efectuó un disparo, aparentemente accidental, que dejó huellas en el piso y terminó impactando en una pileta donde se lavan los servicios. En el medio de la trayectoria estaba el efectivo que de milagro el balazo no le impactó.
La denuncia es grave y hasta ayer, desde la Jefatura de la Policía y desde el Ministerio de Seguridad, no se habría tomado una decisión en cuanto a posibles sanciones por su proceder, contra el subcomisario. De hecho, lleva un par de días sin presentarse a trabajar, según relataron fuentes oficiales.
Sus subalternos ya venían notando cierto cambio de humor y bastante hostilidad de parte del segundo jefe del PRIAR de Alvear y que al parecer no era solo con el cabo que lo terminó denunciando. Fuentes internas confirmaron que el denunciante fue revisado por un médico, quien confirmó que presentaba lesiones, aunque de carácter leve y compatible con golpes.
Fuente: Diario Época
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